El emperador romano Nerón vivió y murió con la misma teatralidad, y aunque la historia lo considera un dirigente despiadado y extravagante, no abandonó sus ideales ni siquiera en su final.
Inicialmente relegada por su incapacidad de procrear, Catalina de Médici se convirtió en reina consorte y finalmente en regente de Francia tras la muerte de su esposo y sus hijos. Su habilidad polític ...